sábado, 9 de abril de 2011
Oficio: Apicultora
No era,, ni es aún, una actividad que compartamos por igual hombres y mujeres.
Es un trabajo desarrollado por y para hombres, al cual hay que adaptarse y modificar para hacerlo accesible a nuestra capacidad física.
Las contras: Nuestros miedos propios y ajenos: "que hago si....", "y si te pasa....."
Respuestas: Planificar, prevenir, plantearnos el peor de los escenarios y buscarle la vuelta.
Consejos: Aplicar la lógica, no desoír tu intuición ( que creo que es un don mujeril), y no tener miedo a arriesgarse....si salio mal, se aprende y se vuelve a buscar el modo.
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Qué bueno, Raquel!!! Me hiciste emocionar con este bello trabajo. El enfoque que le has dado hace la diferencia. Ser mujer, ser de pueblo chico (infierno grande), defenderse sola en la vida, no es fácil y es un desafío que al final del camino tiene sus recompensas. Es un gusto compartir contigo un ratito de ruta. Gracias por permitírmelo.
ResponderEliminarFelicitaciones!!Espero que sigas contando más historias, muy enriquesedoras!!!
ResponderEliminarMuy lindo el blog, seguí adelante que la participación en internet hace que surjan estas buenas cosas. Saludos desde Cerro Colorado.
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