sábado, 11 de junio de 2011

el trabajo....ese lugar de una

Cuando comenzamos una actividad que no poseemos experiencia, todo es novedad, temor, dudas. Luego nos afianzamos en ella, aprendemos, escuchamos, nos enriquecemos. Pero que pasa cuando la realizamos por mucho tiempo ? Nos organizamos, minizamos errores, nos confiamos. Y luego? parecería que hay una etapa que nos satura el tener siempre la guardia en alto, y tenemos la tentación de buscar otros horizontes ( persevera...persevera para poder disfrutar las mieles de lo producido)....y después la etapa casi diría de pertenencia: uno pertenece a ella. Es decir, no me imagino una primavera sin ver mis abejas, que floración tenemos, si viene atrasada la temporada, si tienen cría, etc, etc.. La cosecha ( !que calor!) pero que placer ver fluir la miel .
Y el otoño? viene frío,? Lluvioso? las tengo que curar, abrigar y evaluar. En fin creo que ha esta altura tenemos un amor correspondido: las abejas y yo.

sábado, 9 de abril de 2011

Oficio: Apicultora


No era,, ni es aún, una actividad que compartamos por igual hombres y mujeres.
Es un trabajo desarrollado por y para hombres, al cual hay que adaptarse y modificar para hacerlo accesible a nuestra capacidad física.
Las contras: Nuestros miedos propios y ajenos: "que hago si....", "y si te pasa....."
Respuestas: Planificar, prevenir, plantearnos el peor de los escenarios y buscarle la vuelta.
Consejos: Aplicar la lógica, no desoír tu intuición ( que creo que es un don mujeril), y no tener miedo a arriesgarse....si salio mal, se aprende y se vuelve a buscar el modo.

¿Para que este blog?


Siempre me he planteado si no estaría bueno que las mujeres del Interior, compartiéramos - sin tapujos, con honestidad y tratando de apoyarnos mutuamente nuestras experiencias de trabajos no tradicionales.
Es sabido que el vivir en el Interior tiene sus pro y sus contras ( muchas) para el trabajo independiente de las mujeres.
A favor destaco que esta casi todo por inventar.
En contra: animarnos, luchar contra nuestros miedos y los ajenos ( el fracaso es mas notorio en nuestras pequeñas comunidades).
Lo que se espera de nosotras, a veces no es lo que realmente queremos, o la vida nos abre otras puertas que nos tientan.